04 Ene El Presupuesto General del Estado 2023: una mirada desde los hidrocarburos
Con el deseo de que este 2023 venga colmado de muchas cosas buenas para usted y sus seres queridos, comienzo con una mirada al Presupuesto General del Estado (PGE) programado para el año 2023.
Primero veamos los supuestos globales. El PGE proyecta una tasa de crecimiento del PIB de 4.86%, muy por encima de la proyectada por organismos internacionales. CEPAL: 3.0%; FMI: 3.2% y Banco Mundial: 2.7%. Por otra parte, se espera una tasa de inflación del 3.6%, cifra que está por encima del 2.7% esperado del año 2022 y del 0.4% del año 2021. En resumen, el PGE espera un crecimiento alto, así como también una tasa de inflación elevada. Hasta aquí ninguna novedad.
Respecto a la recaudación por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) se proyecta un valor de Bs 6,3 mil millones. ¿Es mucho? ¿es poco? El año 2014 la recaudación por este mismo impuesto fue de Bs 15;6 mil millones, haga usted la matemática. El año 2014 fue un buen año, cuando la producción era elevada, porque los precios internacionales de esa época son muy parecidos a los de ahora.
Por otra parte, si comparamos la recaudación proyectada por IDH contra el subsidio a la gasolina y diésel esperado en el PGE, la situación se torna aún más desafiante. En sencillo, el IDH recibido será 6,3 mil millones de Bs; y, por otra parte, el costo del subsidio esperado será de 7,3 mil millones de Bs. En este caso, las malas noticias son para el Tesoro General de la Nación (TGN) y las Gobernaciones, ya que estas instituciones financian la mayor parte del subsidio, pero reciben una parte muy pequeña del IDH.
Respecto a las exportaciones de gas natural. El PGE espera un valor de USD 2,7 mil millones, debajo de los USD 3,1 mil millones del año 2022. Esta disminución quizás obedece a que en la proyección del PGE se utilizó un precio internacional del petróleo aproximado de USD/Barril 67, debajo de los USD/Barril 95,2 del año 2022. Por otra parte, la venta de urea ayuda, pero muy poco, se espera que estas alcancen los USD 0,4 mil millones el año 2023.
Con relación a la inversión en el sector. La presentación realizada del PGE proyecta para el futuro (no se sabe si solo para el 2023 o del 2023 adelante) un total de USD 7,9 mil millones, de los cuales 5,1 se relacionan con la producción de gas natural, biodiésel, etanol, etc.; 2,2 es un denominado “fortalecimiento institucional”, 0,3 se destina a la industrialización y, 0,3 a un “fortalecimiento a la inversión”. Sería deseable conocer las fuentes de financiamiento de esta inversión, ya que el total sobrepasa los ingresos brutos de YPFB proyectados para el año 2023.
¿Cómo podemos resumir estas cifras? Aquí van algunas conjeturas (insertas en el PGE) para el año 2023:
1.Se espera un valor menor, al observado el año 2022, por exportaciones de gas natural, tanto a Brasil como Argentina.
2.Por el contrario, se espera que las importaciones de gasolinas y diésel oíl no disminuyan y, por tanto, el subsidio se sitúe en niveles muy parecidos al año 2022.
3.Este subsidio, a la gasolina y diésel, se anticipa mayor a la recaudación por el Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH). Lo que deja al TGN en una situación muy poco cómoda, ya que esta institución financia gran parte del subsidio y recibe una parte (pequeña) del IDH.
4.La inversión programada está muy por encima de los ingresos brutos de YPFB, por este motivo, se espera algún tipo de financiamiento externo para la estatal petrolera.
La lectura “entre líneas” del sector hidrocarburos a través del PGE presenta una situación muy frágil, con la producción en declinación, menores exportaciones, ingresos por IDH menores al costo de los subsidios, mayores importaciones y un agresivo plan de inversión con una maduración incierta y de mediano plazo.
Es momento de repensar el sector.
S. Mauricio Medinaceli Monrroy
Asunción, 4 de enero de 2023
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